jueves, 30 de diciembre de 2010

TU ERES...LA VIDA

Escucha mi voz pequeña Alejandra, pues te voy a contar un cuento de hadas, en el que tu eras su bella princesa. Hubo un tiempo, en que un sueño se trasformo en una esperanza cumplida, en una dulce y bella promesa, eras tú, el sueño más grande nacido a la vida. Cuando tu llegaste a este mundo, una hada te toco con su varita mágica. Te dio el don de la sonrisa que nace en los labios, el de las lágrimas que brillan en los ojos, y salen del corazón, el de los besos que hablan sin palabras porque son muy sabios, y el de la alegría que sale del alma y es toda ilusión.
Tu hada, se acerco a ti y te dijo estas palabras al oído: -con todo lo que hoy eres, tu crecerás pequeña Alejandra, con el calor de los besos, que darán siempre color a tu cara, crecerás tan bella, como una eterna rosa, tendrás siempre la sonrisa en tus ojos, y la bondad de tu alma hermosa. ¿Escuchas todavía mi voz? ¡Ay! Sé que
ahora estás muy cansada, duerme mi pequeña princesa de cuento de hadas, que el día se acaba y la noche llega entre suspiros, se ilumina el cielo con miles de estrellas que te mandan besos de cariño. Mientras se escucha una música desconocida, es de una nana antigua de las viejas hadas, y una voz tenue y muy dulce canta, duérmete mi niña que ya es la hora, duerme tranquila, que por nuestra magia te arropara siempre, el amor y la vida.
Para Alejandra en el día de su bautizo. La princesa de las hadas con cariño.

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