jueves, 2 de septiembre de 2010

Dialogando con el tiempo

Llevo tantas ilusiones dentro de mi con las que sueño cada día, me hacen llorar emocionada, reír ilusionada y hablar porque me encanta. El tiempo mi viejo amigo, se queda asombrado conmigo y me para los pies. Si él pudiera hablar me diría: - Ha donde quieres llegar mujer, a estas alturas de tu edad ¡ni que fueras una niña! -Lo soy tiempo, tú solo ves mi exterior mira en mi interior y verás el reflejo de mi misma siendo niña. Tú me conoces desde que nací y sabes que unos veinte años atrás, no pude hacer lo que yo quería, escribir libros; soñaba con ser escritora. Ahora lo soy, pero sólo un círculo reducido me conoce y han leído mis tres libros, donde la fantasía fluye en sus páginas. Sabes, tengo que darte parte de razón amigo tiempo, he empezado algo tarde. -No es necesario que me lo digas, ya lo sé amiga mía y también sé algo más de otros libros. -Lo que no te has enterado tiempo, es que tengo un ángel en forma de mujer que me ayuda, desde que decidí ser escritora, no te digo su nombre, pero ella es la madre de mis nietos más pequeños, y es un tesoro de persona. A ti amigo tiempo sólo te pido un favor no pases tan rápido por mi vida, dame un poco de ti mismo para seguir escribiendo. -De acuerdo amiga, te haré este favor, y esperaré con paciencia a que la gente te conozca a través de tus libros. Suerte...... Mi amigo se ha marchado y ya no sé si todo ha sido un sueño o una realidad deseada.

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