testigos mudos del ayer en nuetro presente,
dos torres, dos leones quietos sin coraje,
son muestras de un pasado,su escudo y linaje.
Piedras que escuchásteis risas y llantos,
oraciones fervientes o dulces cantos,
si pudierais hablar ¿Qué contaríais?
si os pudiera escuchar ¿Qué me diríais?
Muros derrumbados, aunque la tierra esta caliente,
por el fuerte calor del verano;
siento en mi cuerpo, un escalofrío al contemplaros.
Un soplo de aire acaricia mis cabellos,
y entre el silencio y la soledad;
destaca la blanca sal por sus destellos,
imagino voces, pienso, sólo es el rumor del viento;
o quizás, es el pasado que me habla por un momento.
Cae la tarde, el sol se esconde, fascinada doy mi última mirada,
de pie orgullosa se alza entre las sombras;
una sola pared, que en sus tiempos fue blanca.
Es todo lo que queda, de aquél tiempo de esplendor y gloria,
una sola pared... y quizá un fantasma;
guardián de la casa y de su historia.
con paso lento y cansado, poco a poco me alejo,
allí se queda adosado a ella;
el esplendor antiguo, encerrado en un escudo viejo.
FUENTE CAMACHO-27-7-1991 -GRANADA
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